Modos de recarga en vehículos eléctricos
En el proceso de recarga de un vehículo eléctrico se pueden distinguir diferentes niveles de comunicación entre el vehículo eléctrico y la infrasetructura de la red eléctrica que proporciona la carga. También tiene importancia el control que podamos ejercer sobre el proceso de recarga.
Esos diferentes niveles de comunicación y control del proceso de recarga se denominan "Modos de recarga", y actualmente podemos distinguir los siguientes:
Modo 1 de recarga de vehículos eléctricos
En este modo de recarga básico la conexión entre el vehículo eléctrico y la red se realiza a través de una toma de corriente convencional tipo Schuko. Por lo tanto, no hay comunicación posible entre la red eléctrica de recarga y el vehículo eléctrico. La corriente máxima recomendada para este modo en cargas largas es de 10A (2,3kW).
Este modo de recarga está reservado para la carga de vehículos de pequeña potencia y tamaño, como pueden ser las bicicletas y motos eléctricas con consumos de potencia bajos y pequeñas capacidades de batería, aunque también puede realizarse una carga lenta de vehículos eléctricos con baterías de gran capacidad y potencia, aunque no es el modo más adecuado.
En este modo de recarga, la instalación suele incluir protección diferencial y magnetotérmica.
Modo 2 de recarga de vehículos eléctricos
Durante la carga en modo 2 de recarga se puede alcanzar una potencia máxima de 7,4 kW en tensión monofásica y hasta 22 kW en trifásica, con una corriente máxima de 32 A por fase.
En este caso concreto, la conexión entre el coche eléctrico y la red no es directa como en el modo 1. En modo 2 existe un sistema de seguridad en el cable que permite controlar la fiabilidad de la conexión del vehículo eléctrico, además de establedcer unos parámetros de recarga.
En este modo2 de recarga es necesario disponer de proteccion diferencial y magnetotérmica. La conexión ala red puede realizarse con conectores de baja tensión de tipo Schuko o CEE/CETAC, de 16A o 32A.
Modo 3 de recarga de vehículos eléctricos
Durante la carga en modo 3 de recarga se puede alcanzar una potencia máxima de 7,4 kW en tensión monofásica y hasta 22 kW en trifásica, con una corriente máxima de 32 A por fase, al igual que en modo 2.
La diferencia fundamental entre modo 3 y modo 2 está en la comunicación: el modo 3 de recarga se realiza mediante un cargador específicamente diseñado para la recarga de vehículos eléctricos, el cual debe incorporar las protecciones en la propia infraestructura de carga y un conector especifíco (Tipo 1, Tipo 2 o Tipo 3) que permite una serie de funciones adicionales como la comprobación permanente de la toma a tierra, verificación de conexión correcta, activación y desactivación de carga, así como la posibilidad de seleccionar una potencia de recarga en función de las preferencias del usuario o las necesidades específicas del vehículo.
Modo 4 de recarga de vehículos eléctricos
El modo 4 de recarga ya no se realiza en corriente alterna, como así ocurre con los modos 1, 2 y 3, sino que en este caso la recarga se realiza en corriente contínua, llegando a soportar actualmente potencias de recarga que oscilan entre los 22 kW y los 50 kW.
Al igual que el modo 3 de recarga, el modo 4 también incluye las protecciones necesarias en la infrastructura. Tambien incluye las funciones adicionales de comunicación del modo 3: la comprobación permanente de la toma a tierra, verificación de conexión correcta, activación y desactivación de carga, así como la posibilidad de seleccionar una potencia de recarga en función de las preferencias del usuario o las necesidades específicas del vehículo.
Este modo de recarga se realiza en estaciones de recaga rápida en corriente continua con conectores Chademo o Combo 2.